El pasado miércoles tuvimos la suerte de celebrar una cata
exquisita de los vinos de Bodegas Emilio Hidalgo. Un encuentro que nos permitió acercarnos y
profundizar en la riqueza, variedad y calado de los vinos jerezanos.
Para comenzar, Juan Manuel Hidalgo expuso una reflexión
sobre la trayectoria, tradición y solera de estos vinos que desde hace más de
300 años se cultivan en el conocido “triángulo del Jerez”. Una exposición que
resultó cuanto menos cercana, didáctica y amena.
Seguidamente pasamos a degustar tres vinos muy personales y
diferentes entre sí. Iniciamos la cata con Fino Hidalgo, cuyo aroma nos acercó
a la Jerez más profunda. Su solera y sabor destacaron y aumentaron la curiosidad
por conocer los siguientes vinos.
La Panesa, en segundo lugar, sorprendió por su impresionante
color dorado y su sabor. Un especial fino, más allá del tradicional. Una
personalidad que le diferencia del fino anterior y le distancia de lo
popularmente conocido.
A continuación y como último vino catado se sirvió El
Tresillo, un amontillado que comenzará a distribuirse en esta temporada.
La cata dio lugar a un enriquecedor debate que obtuvo
interesantes conclusiones. Un ambiente cercano que ayudó a generar confianza y
nuevos conocimientos.
Agradecemos a Bodegas Emilio Hidalgo su cuidadosa
organización y a todos los participantes su asistencia y los comentarios
aportados. Entre todos generamos una cata muy interesante. Nuestro deseo es
repetir pronto. Gracias.